El cometa Elenin, el último en visitar nuestro sistema solar interno, pasará a 35 millones de kilómetros de la Tierra -es decir, más de 90 veces la distancia que nos separa de la Luna- durante su máxima aproximación a nuestro planeta, que tendrá lugar el 16 de octubre de 2011, de modo que no representará ninguna amenaza. El cuerpo celeste, también conocido por su nombre astronómico C/2010 X1, se trata de una “bola de hielo sucia y bastante pequeña”, según el Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la NASA, y fue detectado por primera vez el 10 de diciembre de 2010 desde un observatorio de Nuevo México (EE UU).
A pesar de lo mucho que se ha especulado sobre los "desastrosos" efectos de la aproximación del cometa Elenin, su influencia sobre la Tierra será despreciable, ya que ni siquiera tendrá efecto en las mareas o movimientos en las placas tectónicas. Tampoco está previsto que se acerque a ningún cuerpo celeste que perturbe su órbita.
La práctica totalidad de los cometas que se acercan a la Tierra, tienen su origen en el cinturón de Kuiper, una región remota del sistema solar, densamente poblada por asteroides y cuerpos menores. En esta región del espacio se encuentra el afelio de la mayor parte de los asteroides y cometas, es decir, el punto más alejado de su órbita.
Añado de mi propia cosecha (guiño, guiño a la ACT de cara al verano que viene), que en el cinturón de Kuiper está Plutón, el cuál no es un planeta, sino que es un planeta enano desde el 2006.
Bastante más grande que Plutón y al doble de distancia de la Tierra, se encuentra Xena (no es la princesa guerrera, no). Se descubrió en 2005, y se intentó que fuera considerado un planeta, pero al igual que Plutón, la UAI (Unión Astronómica Internacional) lo catalogó como planeta enano.
Otro planeta enano, y que está mucho más cerca, es Ceres, que se encuentra en el cinturón de asteroides que hay entre Marte y Júpiter.
A pesar de lo mucho que se ha especulado sobre los "desastrosos" efectos de la aproximación del cometa Elenin, su influencia sobre la Tierra será despreciable, ya que ni siquiera tendrá efecto en las mareas o movimientos en las placas tectónicas. Tampoco está previsto que se acerque a ningún cuerpo celeste que perturbe su órbita.
La práctica totalidad de los cometas que se acercan a la Tierra, tienen su origen en el cinturón de Kuiper, una región remota del sistema solar, densamente poblada por asteroides y cuerpos menores. En esta región del espacio se encuentra el afelio de la mayor parte de los asteroides y cometas, es decir, el punto más alejado de su órbita.
Fuente: Muy Interesante
Añado de mi propia cosecha (guiño, guiño a la ACT de cara al verano que viene), que en el cinturón de Kuiper está Plutón, el cuál no es un planeta, sino que es un planeta enano desde el 2006.
Bastante más grande que Plutón y al doble de distancia de la Tierra, se encuentra Xena (no es la princesa guerrera, no). Se descubrió en 2005, y se intentó que fuera considerado un planeta, pero al igual que Plutón, la UAI (Unión Astronómica Internacional) lo catalogó como planeta enano.
Otro planeta enano, y que está mucho más cerca, es Ceres, que se encuentra en el cinturón de asteroides que hay entre Marte y Júpiter.
Gracias por la información me ayudo mucho
ResponderEliminar